Físico.
El dolor en los sueños es un fenómeno interesante. A veces, el EVENTO DE EMPUJAR es una posición incómoda para dormir; así el cuerpo te dice: "Querido, da la vuelta al otro lado". Además, la capacidad de la mente para desarrollar estímulos físicos correspondientes a los eventos de un sueño es asombrosa en sí misma. Desde un punto de vista emocional, los sueños con elementos de reacciones físicas son más realistas o, más correctamente, más reales.
Las sensaciones dolorosas a menudo se relacionan con un área específica de lesión corporal. Tales sensaciones son más apropiadas en los sueños donde hay hematomas, infecciones o AMPUTACIÓN, y las sensaciones físicas van acompañadas de imágenes visuales. Trate de recordar dónde se sintió el dolor y relacione esa parte del cuerpo con los aspectos más estrechamente relacionados de su vida.
¿El dolor causado por usted, otra persona, fue un objeto? ¿Es causado a propósito o por accidente?
¿El dolor fue tan intenso que podría haber llevado a una amputación o fue solo un inconveniente?
Exposición Psicológica.
En los sueños, a menudo nos enfrentamos a dilemas que sirven como fuentes de ALARMA del durmiente. Algunas cosas, cuyo significado directo no está disponible para nosotros, permanecen desconocidas como resultado de la introspección, ya que el efecto traumático de resolverlas puede ser verdaderamente destructivo. Si un sueño es una fuente de dolor psicológico, debe tratarse de la misma manera que un sueño en el que hay dolor físico.
¿Es el dolor tan grande que se necesita ayuda, o se hace sentir solo como resultado del rápido flujo de cualquier acción?
¿Con qué frecuencia ocurre el dolor? ¿El dolor empeora o permanece igual?
¿Está experimentando dolor residual en la vida real y cómo afecta a sus tareas diarias?
¿Sientes que tienes los conocimientos y los recursos para afrontar el dolor por tu cuenta, o sientes que las raíces del dolor están profundamente en tu memoria?
Dependiendo de las respuestas que dé a las preguntas planteadas, es posible que necesite ayuda profesional para lidiar con el dolor psicológico que experimenta mientras duerme.